A pesar de cambiar Sankeys por Privilege de forma repentina el pasado Mayo, Darius Syrossian tuvo un 2015 triunfante en Ibiza con el debut de su fiesta Do Not Sleep, cautivando a cientos de jóvenes ravers que acudieron en masa al Vista Club de Privilege a bailar sus sonidos underground.

“La creación de Do Not Sleep fue algo absolutamente orgánico” dice Darius. “Sí, lo de Sankeys pasó, rompí mi relación con el club. Pero les deseo todo lo mejor. Incluso este verano me veréis en su pista de baile. Varios de mis amigos, como Sidney Charles o Shanté, pinchan allí. ¡Es algo del pasado! La vida es demasiado corta para guardar rencores o ser negativo. Todos queremos bailar y divertirnos. Ahora es el momento de seguir adelante”.

Una de las razones por las que Do Not Sleep fue un éxito es porque Darius y su equipo mantienen las cosas en su forma más simple y pura. En su fiesta no hay gogós, ni cañones de humo, ni mesas VIP, ni artificios. Tan sólo una luz estroboscópica de color blanco que parpadea al ritmo de un sonido techno implacable. Un concepto estético y sónico que captura la esencia y la atmósfera de los after.

“Cuando vi el Vista Club por primer vez pensé que era exactamente lo que necesitábamos”, recuerda Darius. “Un espacio grande y diáfano con grandes vistas y un sound system excelente. Do Not Sleep pudo haber sido un fracaso absoluto. Éramos una marca nueva compitiendo contra tres leyendas el mismo día: Steve Lawler en Sankeys, Luciano en Space y Solomun en Pacha. Pero el éxito fue total. Nunca bajamos de las 1.000 personas en todas nuestras fiestas.

Este verano Do Not Sleep se muda a Space. El evento se mantendrá la noche de los domingos. El concepto, sin embargo, ha sido ligeramente modificado. “Tenemos más invitados esta temporada”, explica Darius. “Nick Curly y Alan Fitzpatrick estarán como residentes y Hector Couto actuará con ellos en formato back to back en cuatro o cinco fechas. Sidney Charles y Santé se mueven por su cuenta este verano. Ambos tienen su propia marca, Avotre, y no tiene sentido asociarla con Do Not Sleep. Ellos extienden sus alas y echan a volar este verano, lo cual es genial”.

Darius es consciente de la responsabilidad de ser uno de los principales cabezas de cartel de Space en su temporada de despedida: “Todavía no lo he asimilado del todo, Space es un club histórico. Es un honor ser uno de los principales residentes. Cuando fui a hablar con Juan Arenas, director del club, se mostró muy humilde y cercano. Me llevó por Barcelona y no me dejó invitarle a la cena. Para ser honesto, estaba nervioso por reunirme con él, pero me dijo: ‘Mira, conozco tu sonido, y tienes nuestro apoyo’. Como artista no quieres que te digan qué música has de poner. Juan me ha dado la libertad para hacer lo que quiera… Y eso es un privilegio”.